PATRIMONIO NATURAL
Los paisajes y ecosistemas que presenta La Siberia cuentan con un alto grado de conservación y variedad, contando la comarca con uno de los mayores índices de Biodiversidad de toda la Península Ibérica. A ello ha contribuido en buena medida el carácter aislado y poco poblado de esta región, pero también la apuesta por técnicas tradicionales en sus prácticas agroganaderas.
En su gran variedad de ambientes ecológicos encontramos flora y fauna diversa, bosques que engloban múltiples especies arbóreas y todo tipo de matorrales. Pastos y dehesas, llanuras, humedales y sierras conforman hábitats dispares que se complementan con las grandes áreas acuáticas que bañan la comarca, de imponente riqueza fluvial, no en vano es considerada la mayor costa interior de toda España, gracias a sus extensiones kilométricas de costas de agua dulce. Su riqueza vegetal es tal, que cuenta con 26 Hábitats de Interés Comunitario, 4 de los cuales son considerados como de Interés Prioritario.
Rica es La Siberia en Biodiversidad, no solo en su flora, sino también en su fauna. Conviven cerca de 500 especies de vertebrados, desde múltiples peces como el lucio, la carpa, el barbo o el black – bass, en sus numerosas zonas de pesca, a ello contribuyen en buena medida los embalses de la zona; a mamíferos asociados al bosque mediterráneo, cultivos y dehesas como ciervos, corzos, jabalíes y nutrias. Hay que destacar a este respecto el asentamiento de comunidades de quirópteros en algunas áreas, anfibios y reptiles. Pero si hay una categoría de animales que por su presencia destacan por encima del resto en La Siberia, esa es la avifauna. Cientos de aves, algunas consideradas auténticas joyas de la península como el águila imperial, cigüeña negra, azor, alimoche, grulla, a pueden atisbarse en los parajes de La Siberia, que se erige en todo un paraíso ornitológico, ideal para los amantes del “Birdwatching” o Turismo ornitológico, que pueden contemplar a las aves desde los numerosos miradores naturales que pueden encontrarse en la comarca.
Todos estos elementos hacen de La Siberia un espacio natural impresionante, que ha motivado la declaración de diversos Espacios Naturales Protegidos, acogidos a diversas figuras. En el territorio confluyen lugares protegidos a nivel internacional como ZEPA (Zonas de Especial Protección para las Aves) y ZEC (Zonas de Especial Conservación) dentro de la Red Natura 2000 y Zona Ramsar, y a nivel autonómico a través de las figuras ZIR (Zona de Interés Regional) y CEB (Corredor Ecológico y de la Biodiversidad).